Implantes dentales
Los implantes dentales son una opción de tratamiento para reemplazar uno o más dientes perdidos.
Consisten en un pequeño tornillo de titanio que se coloca en el hueso maxilar o mandibular, y actúa como una raíz artificial sobre la cual se coloca una corona dental.
Su funcionalidad es exactamente igual que la de un diente biológico y la calidad de la masticación es extraordinaria.
Existen principalmente dos tipos de implantes dentales:
TIPOS DE IMPLANTES DENTALES
1. Implantes dentales con cirugía: En este tipo de procedimiento, se realiza una incisión en las encías para exponer el hueso subyacente. Luego, se realiza una perforación en el hueso y se coloca el implante en la posición adecuada. Después de la colocación del implante, se suturan las encías y se debe esperar un período de cicatrización antes de colocar la corona dental sobre el implante.
2. Implantes dentales sin cirugía: También conocidos como implantes dentales «sin corte», esta técnica se utiliza cuando hay suficiente hueso disponible y saludable. Este tipo de implante no requiere hacer una incisión en las encías ni perforar el hueso. En cambio, se utiliza un sistema especializado que permite colocar el implante a través de la encía directamente en el hueso alveolar.
Ambos tipos de implantes dentales son seguros y efectivos, pero la elección del método de inserción depende de varios factores, como la cantidad y calidad del hueso disponible, así como las preferencias del paciente y la recomendación del profesional dental.
Es importante destacar que, independientemente del tipo de implante dental utilizado, es necesario seguir un protocolo de cuidado postoperatorio adecuado para garantizar una óptima cicatrización y éxito del tratamiento. Además, los implantes dentales requieren un mantenimiento regular y una buena higiene oral para mantener su función a largo plazo.
